Antes de maquillarse, la piel de la cara debe estar totalmente limpia y libre de impurezas. Se recomienda enjuagarse todos los días la cara varias veces con abundante agua y jabón. Si se tiene problemas de piel o por ejemplo granitos, muchos dermatólogos recomienda utilizar jabón neutro o de glicerina. Conviene aplicar diariamente una crema hidratante en el rostro. En los casos en que se tenga piel muy grasa, no es conveniente aplicar continuamente productos sobre la piel.
Para que las cremas hidratantes funcionen mejor, es conveniente utilizar antes un exfoliante de cara. Los exfoliantes se pueden comprar o también se pueden preparar en casa, por ejemplo disolviendo aspirina en yogurt, en leche, o en agua tibia. Cuando la aspirina disuelta se pone sobre la cara, funciona como exfoliante.
En el momento previo al maquillaje, hay que enjuagar bien la cara y quitar todo rastro de impurezas o de cremas que se hayan colocado previamente. Si se deja algún rastro de crema en la cara, el maquillaje estaría sobre una base demasiado grasa, lo que seguramente provocaría que a las pocas horas el maquillaje ya no esté como debería estar, haciendo que se vea peor.
El cuidado de la piel también varía según la época del año. Durante el verano, es conveniente utilizar protectores solares, porque aunque las mujeres quieren ver su piel morena o bronceada, el sol no es bueno para la piel y quemarla es todavía peor. En caso de broncearse, luego hay que cuidar más la piel. Para esto, conviene utilizar productos hidratantes especiales para quemaduras solares, que ayudaran a regenerar los tejidos dañados.
Cuando las temperaturas son muy frías, además de utilizar productos hidratantes y exfoliantes, se recomienda no tener la calefacción a temperaturas muy elevadas ni tomar baños con agua demasiado caliente, ya que perjudicarán la piel.
Paso a Paso
1. Desinfectarse las manos con alcohol.
2. Aplicar crema de limpieza o leche limpiadora en el rostro y cuello, con movimientos ascendentes y circulares. En el cuello aplicar de abajo hacia arriba, masajeando.
3. Retirar con agua tibia y una esponjita.
4. Alicar tónico facial, para terminar de eliminar las impurezas que pudiesen haber quedado. Embeber la locion tonificante en un trozo de algodón, dando pequeños golpecitos, por todo el rostro y cuello.
5. Aplicamos crema humectante, de la misma manera que aplicamos la crema de limpieza, pero sin retirarla.
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